Tres reglas básicas para ser un copiloto estrella
Viajar en el asiento del copiloto es más que espacio extra para tus piernas. Así como el conductor tiene la responsabilidad de estar #ActivoEnLaVía y llevar a todos los pasajeros a su destino sanos y salvos, el copiloto, quien es el segundo al mando en el carro, debe ayudarlo a no distraerse y ser un aliado del camino.
Aquí te traemos tres reglas básicas para ser el mejor copiloto y asegurarte que todos tengan un viaje agradable y lleguen a salvo a donde van.
Atención a los detalles
La tarea principal del copiloto es estar atento al camino. Es por eso que debes llevar el #OjoPelao y no dormirte, a menos que sea una ruta larga donde tomarán turnos para manejar. Si este no es el caso, es necesario mantenerse alerta ante cualquier imprevisto que se le pueda escapar al conductor. Un buen copiloto, además, sabe de mantenimientos básicos del carro como cambiar un caucho o el aceite, así que también puede estar pendiente de cualquier ruido o detalle que pueda presentar el vehículo en la vía.
Asegúrate de chequear todos los carteles y señalamientos, así como las condiciones del tráfico y de la vía, como un hueco, un animal o un ciclista. Es importante, además, señalar sin criticar al que está manejando y haciendo los comentarios que sean necesarios sin distraerlo con otros elementos de la vía como el paisaje o algo curioso, en especial si el copiloto conoce el camino mejor que el conductor.
Sin distracciones
Un buen copiloto es DJ, guía turístico, mecánico, asistente, buscador de Google y hasta comediante. Todas estas tareas deben ser realizadas por el copiloto para recrear al conductor sin desconcentrarlo de la vía, ya que debe enfocarse en manejar y no en realizar otras actividades dentro del carro como cambiar la radio, usar el teléfono o buscar la ruta en el GPS.
Aunque es necesario amenizar el camino con una buena conversación o algo de música, en especial si se viaja con más personas, es fundamental que el copiloto no se convierta en una distracción para quien maneja, así que ponerse de acuerdo con qué se va a escuchar y no pedirle CDs o dispositivos al conductor es de mucha ayuda, igual que entablar conversaciones ligeras que no requieran de toda su atención.
Descansos
En los viajes largos, regular las paradas también es tarea del copiloto, ya que es él quien está a cargo de ver la hora, saber qué distancia han recorrido y cuánto falta para llegar. Estirar las piernas, comer algo, tomar agua e ir al baño son tareas importantes para evitar la fatiga, asegurar el rendimiento del conductor y la comodidad de quienes viajan, sobre todo si llevan niños.
Estas pausas deben realizarse cada dos horas aproximadamente, así que pueden planificar exactamente en qué sitios quieren parar según sus conveniencias. Además, si el conductor está muy cansado o el viaje es muy largo, pueden aprovecharse estos recesos para que el copiloto tome el volante, asegurándose de tener todos sus papeles y permisos en regla.
Un copiloto que conoce la vía, las leyes de tránsito, las normas de conducir y puede entretener y atender al conductor y los pasajeros sin distraer o desconcentrar merece el título de copiloto estrella. ¿Eres uno de ellos? ¡Déjanos un comentario!